Somos “el oriente de Andalucía”, el sur de Europa, exótico y lejano
La primavera viene de oriente, como los reyes magos, como los genios de las lámparas, como los recuerdos alegres y misteriosos de la infancia.
Oriente y oriental: palabras que, con sólo pronunciarlas, evocan placeres y misterios, novedades desconocidas y lejana antigüedad.
Somos “el oriente de Andalucía”, el sur de Europa, exótico y lejano, un espacio mítico y a menudo desconocido, un Mediterráneo de playas vírgenes, de salinas milenarias y aguas trasparentes y cálidas.
Por oriente sale el sol, por eso también se llama levante: “zona donde el sol se levanta”;
y Este: del germánico austra, del indoeuropeo aurora. Sol y luz , mucha luz.
Oriente, la sencillez de la arena y la cal, el placer del sol, el calor de la lava.
Oriente, sugerencia y belleza, naturaleza pura, flores, recuerdos del Alandalus.
Oriente, destino de aves de paso, garzas reales, flamencos rosas.
Oriente, una Andalucía distinta y sorprendente de naturaleza antigua, sueño de volcanes y caprichosas formas, Sabiduría popular, que administró durante siglos sus aguas subterráneas, secreto tesoro codiciado como los alumbres y el oro. Bienvenidos.