El Parque respira después del ajetreado Agosto español
Nuestro verano deja de ser “verano total” a finales de Octubre, cuando con el cambio de hora anochece antes y empieza a reverdecer el Parque. Es Septiembre el mes preferido de todos aquellos que pueden veranear en esta época, y cuando todavía veranear no pierde su significado: disfrutar del verano.
Los días de playa son largos y apacibles, la temperatura del agua nos permite largos y placenteros baños, el calor nos obliga a resguardarnos del sol al medio día pero ya no es un fuego del que hay que esconderse.
Tras la lluvia del final de Agosto, un clásico en el Parque, las pitas y las chumberas se han quitado el polvo de los caminos y parece que también algo de sed.
Un mes ideal para disfrutar de actividades que nos dejarán conocer un entorno increíble, fondos marinos únicos y espectaculares, barrancos de increíbles formaciones geológicas desde el mar, paseos bici que nos lleven a paisajes de una fantástica naturaleza, o sencillamente andar, asombrarnos de los sonidos del silencio, disfrutar de tanta luz y tanto cielo, tanto horizonte…
Todos los servicios funcionan, todo está abierto, los habitantes del Parque están preparados para recibirte y para atenderte, mientras disfrutas de la naturaleza, con noches de grillos y buhos en el interior y música de agua en el rompiente.
El Parque respira después del ajetreado Agosto español, en el que tantas familias disfrutan de las vacaciones y las fiestas típicas de orquestas y charangas.
Si puedes no lo dudes y disfruta de nuestro verano.
